El COVID19 afectó todo, especialmente la forma en la que las organizaciones trabajan. Para poder recuperarnos de los efectos de la pandemia en el entorno empresarial, debemos movernos hacia el nuevo mundo y dejar de seguir haciendo los negocios como de costumbre.
El entorno actual exige un cambio fundamental en la estructura y el liderazgo de las empresas hacia una evolución digital, que impulse la colaboración y la alineación entre los equipos en un entorno sin contacto.
Una estructura adecuada que impulse la colaboración
La estructura digital está orientada a equipos. Esto permite que diferentes áreas, como finanzas y recursos humanos, trabajen juntas para hacer las cosas. Puedes estar pensando que ya lo has estado haciendo. Pero la colaboración entre áreas y la formación de equipos es diferente ahora.
La alineación es mucho más importante en la economía actual y en el entorno de trabajo remoto. Debes asegurarte de que todos estén remando en la misma dirección. No puedes hacer eso con una estructura obsoleta, orientada a departamentos o funciones que permita a las personas hacer parte de un trabajo y llamarlo un éxito a pesar del hecho de que el proyecto en general falle.
Las adquisiciones, las ventas y los servicios son cada vez menos sensibles y las empresas deben prepararse para eso. Es como cuando Walmart anunció que solo haría negocios con empresas que admitan el intercambio electrónico de datos o EDI (muro de pago).
Necesitas estar preparado para más de este tipo de cosas. No asumas que lo que han estado haciendo va a funcionar en un mundo posterior a una pandemia. Podrían surgir miles de nuevos requisitos de miles de clientes diferentes. Es probable que las adquisiciones no realicen revisiones de proveedores en persona; debe estar habilitado virtualmente y entregar precios a través de una plataforma digital.
Este cambio tiene enormes implicaciones para la estructura, la estrategia y las habilidades.
Quizás estemos subestimando cómo superar esta crisis y hasta qué punto la estructura debe cambiar para brindar experiencias superiores a los clientes y asociados.
La forma en que funcionan las empresas está cambiando, y debe cambiar un poco más, porque el comportamiento y las expectativas de las personas están cambiando. McKinsey informó que el 15% de los consumidores estadounidenses probaron la entrega de comestibles por primera vez durante la pandemia, y el 40% planea pedir alimentos en línea y recibirlos incluso después de que salgamos de esta crisis.
Esto marca un cambio fundamental. ¿Cómo van a manejar eso las tiendas de comestibles, que ganan mucho dinero con artículos impulsivos cerca de la caja, como barras de chocolate y chicle? ¿Cómo van a cambiar los gimnasios?
Muchos empresarios hablan de cómo se van a recuperar de esta crisis. ¿Cómo? ¿Cuál es tu estrategia para recuperarte? Nos estamos moviendo hacia un mundo nuevo que podría tener serias implicaciones en la estrategia y la estructura. Para ofrecer resultados comerciales sostenibles en el futuro, debes asegurarte de comprender a los clientes, las ofertas y los mercados tal como existen en la actualidad. Necesitas una estructura que te permita competir con eficacia y ser receptivo. Y además necesitas el liderazgo y las habilidades adecuadas que encajen en la nueva estructura y te ayuden a ejecutar su estrategia.
Si este tema te inquieta, es momento de conversar. En Amagi podemos guiarte a tomar nuevas decisiones que ayuden a mantener tu negocio operativo y exitoso, incluso después de la pandemia.